En la industria alimentaria global, la calidad del aceite y la eficiencia en su producción son factores clave que definen la competitividad internacional. Las empresas que procesan aceites vegetales como soja, maní o palma deben optimizar cada etapa del proceso — desde la preparación de la materia prima hasta la extracción final del aceite — para cumplir con estándares internacionales y reducir costos operativos.
La prensa mecánica tradicional ha evolucionado hacia sistemas integrados que combinan presión controlada, filtración física y monitoreo en tiempo real. Según estudios de la International Society of Oilseed Processing (ISOP), las nuevas tecnologías permiten aumentar la recuperación de aceite entre un 8–12% en comparación con métodos antiguos, especialmente en oleaginosas como el maní o la soja.
| Tipo de grano | Rendimiento promedio (%) | Reducción de energía (%) |
|---|---|---|
| Soja | 92–95% | 18–22% |
| Maní | 87–90% | 15–20% |
| Palma | 85–88% | 12–16% |
Estos avances no solo mejoran la rentabilidad, sino que también garantizan una calidad constante del aceite, crucial para los mercados europeos y asiáticos donde se exige trazabilidad y cumplimiento con normativas como ISO 22000 o HACCP.
No existe una única fórmula para todos los aceites. Por ejemplo, el maní requiere temperaturas más bajas durante el prensado para evitar oxidación, mientras que la soja necesita una humedad óptima entre el 8–10% antes de entrar a la prensa. Los fabricantes líderes ya implementan sensores IoT que ajustan automáticamente parámetros como presión, velocidad y temperatura, reduciendo errores humanos y aumentando la estabilidad del proceso.
Una empresa de Colombia que produce aceite de maní para exportación reportó una mejora del 25% en la eficiencia energética tras adoptar este tipo de sistema automatizado. Ello se tradujo directamente en una reducción del 15% en costos por tonelada producida, sin sacrificar la pureza del producto.
¿Quieres saber cómo tu planta puede alcanzar estos niveles de eficiencia? Nuestro equipo técnico ha ayudado a más de 50 empresas latinoamericanas a mejorar sus procesos de extracción mediante soluciones personalizadas basadas en datos reales de campo.
Las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) suelen enfrentar desafíos como fluctuaciones en la calidad del aceite o alta variabilidad en el rendimiento. Un sistema moderno de prensado no solo resuelve esto, sino que también simplifica la gestión diaria, reduce la necesidad de intervención manual y permite escalar con mayor confianza.
Además, al usar técnicas de filtración física avanzada (como filtros de papel de celulosa de alta densidad), se logra una claridad superior del aceite, lo cual es fundamental para cumplir con los requisitos de mercados como Alemania o Japón, donde la percepción de calidad influye directamente en la decisión de compra.
Transforma tu producción hoy — sin comprometer la calidad ni el costo
Descubre cómo nuestros sistemas de prensado pueden adaptarse a tus necesidades específicas de mercado.
Solicita una evaluación técnica gratuita →