En la industria del aceite de maní, los productores se enfrentan a desafíos crecientes en la exportación debido a la creciente rigurosidad de las normativas ambientales internacionales. ¿Sabes qué? La falta de cumplimiento ambiental y la inadecuación de los procesos son los principales obstáculos que impiden que muchas empresas de aceite de maní accedan a los mercados internacionales.
Actualmente, muchos productores de aceite de maní se encuentran con dificultades en la exportación. Un estudio reciente muestra que aproximadamente el 30% de las empresas de aceite de maní en Asia del Sur enfrentan problemas de exportación debido a la no conformidad con las normativas ambientales y la baja calidad del producto. La falta de control en la selección de materias primas, la inadecuación de los parámetros de prensado y la elevada tasa de valores de peróxido son los principales factores que afectan la calidad del aceite de maní.
Para producir aceite de maní que cumpla con los estándares internacionales, es esencial controlar cada paso del proceso. En cuanto a la selección de materias primas, se deben elegir maníes de alta calidad con bajo contenido de humedad y ausencia de hongos. En el proceso de prensado, la temperatura y la presión son parámetros críticos. Generalmente, una temperatura de prensado entre 120°C y 130°C y una presión adecuada pueden garantizar una alta tasa de Extracción de aceite y una baja tasa de valores de peróxido. Además, el control de los índices principales como el valor de peróxido y el índice de acidez es crucial para garantizar la calidad del aceite.
La línea de prensado automática de aceite de maní juega un papel crucial en la mejora de la calidad del producto y la cumplimiento ambiental. Esta línea reduce significativamente los errores humanos, ya que todo el proceso está controlado por un sistema automatizado. Además, la tecnología de producción limpia y la reducción del consumo de energía son dos características destacadas de esta línea. Por ejemplo, un estudio ha demostrado que una línea de prensado automática puede reducir el consumo de energía en un 20% en comparación con las líneas tradicionales.
Organizaciones internacionales como ISO 22000 y HACCP han establecido estándares rigurosos para la producción de aceite de maní. Estas normas no solo se centran en la seguridad alimentaria, sino también en la sostenibilidad ambiental.
Según la ISO 22000, las empresas deben implementar un sistema de gestión de la seguridad alimentaria integral que abarque desde la selección de materias primas hasta el empaque final.Cumplir con estos estándares no solo es una obligación legal, sino también una forma de mejorar la competitividad en el mercado internacional.
Un caso real ilustra cómo una empresa de aceite de maní en China aplicó una línea de prensado automática y logró pasar con éxito la certificación de materiales en contacto con alimentos de la Unión Europea. Antes de la implementación de la nueva línea, la empresa enfrentaba problemas de calidad y no podía acceder al mercado europeo. Después de la actualización tecnológica, la calidad del aceite de maní mejoró significativamente, y la empresa pudo exportar sus productos a varios países europeos.
Las normativas ambientales continúan evolucionando, lo que tendrá un impacto a largo plazo en el proceso de prensado de aceite de maní. Las empresas deben estar preparadas para adaptarse a estos cambios y buscar tecnologías más limpias y eficientes. La tendencia futura apunta hacia un mayor énfasis en la reducción de residuos, la mejora de la eficiencia energética y la producción de aceite de maní más saludable.
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